La casa Sinn nos presenta su nuevo Sinn 158 Traditional Bicompax Chronograph. Un reloj que es homenaje a uno de los relojes más buscados por los coleccionistas de relojes militares y concretamente de piloto de la casa Sinn.
Los relojes militares levantan pasiones y más en especial los de aviador, pilotos de aviones. En este caso el Sinn 158 rinde homenaje al 155 BW. Un reloj que nació fruto de un conjunto de curiosos acontecimientos. En la década de los 80 las fuerzas armadas sustituyeron el reloj cronógrafo Heuer 1550 SG y Helmult Sinn, fundador de la compañía Sinn, se hizo con todo el inventario. Esos relojes los reacondicionó, les puso las letras Sinn en el dial debajo de la etiqueta ‘Bundeswehr Cronógrafo para pilotos” y los vendió como modelo 155 Bw. El calibre que utilizaba en su interior era el Valjoux 230.
Sinn 158 Traditional Bicompax Chronograph
Ahora nos presentan este nuevo reloj basado en el histórico modelo de esta casa Alemana. Todo un homenaje que se realizará en una edición limitada y numerada de 500 unidades.
La caja, como el original, es de acero con acabado arenado con un tamaño de 43 mm de diámetro y un grosor de 15.15 mm. Su cristal es acrílico abombado. El bisel es de aluminio y está inspirado en el del 155 BW. Tiene una resistencia al agua hasta los 10 bar de presión. La trasera es de acero y luce la inscripción en el centro de xxx/500.
En su interior el calibre utilizado es el Sellita SW 510. Mecánico, cronógrafo, de cuerda automática y una reserva de marcha de 48 horas.
La esfera es negra mate y sobre ella destacan la grafía e indices blancos, juntos con las agujas, a excepción de la trotadora y contadora de minutos que son rojas. A las 6 horas está localizada la fecha. Tanto las agujas de las horas y minutos como los numerales de las horas están tratados con material luminescente.
No nos han facilitado el precio pero mirándolo a través de su web no sale sobre 2650€.
Nuestra Opinión
¿Nos gusta? Si. Es un estilo que nos recuerda a los cronógrafos de tipo piloto de los años 60-70 y eso nos encanta. Igual que la gracia utilizada nos parece muy acertada. Seguramente hubiéramos preferido un cristal de zafiro en vez de acrílico, aunque puede ser que no hubiera sido un homenaje completo, lo que nos da más tranquilidad a la hora de utilizarlo sin miedo a los pequeños rayones. Cierto es que el coste de sustitución de un cristal acrílico suele ser poco.
¿Lo compraríamos? Si. Nos hubiera gustado más con cristal de Zafiro y habría que ver cómo quedan esos 43 mm y esos 15 de grosor en muñecas pequeñas, pero nos gusta y sería una opción.
Precioso. Entiendo que el precio es porque es una edición limitada, si no fuera así, me parecería elevado, por lo del Cristal, bisel y máquina que lleva. Pero estéticamente me encanta.
Un saludo.
Si eso es. Limitado a 500 unidades numeradas.